Situación legal del cannabis no psicoactivo (Cannabis sativa) en tres diferentes zonas de Ecuador y sus beneficios terapéuticos

Abstract

El cannabis no psicoactivo fue legalizado en Ecuador mediante el Decreto Ejecutivo 1109, emitido por el ex presidente Lenín Moreno el 29 de mayo de 2019. En 2020 se estableció un marco regulatorio específico, que establece que los productores deben obtener una de las siete licencias otorgadas por la Autoridad Agraria Nacional. En este marco legal además dice que las licencias tienen una duración de 10 años, con renovación automática, pero su vigencia está condicionada al cumplimiento de normativas. Así mismo dispone que para la siembra de cannabis en el Ecuador se exige que los niveles de tetrahidrocannabinol (THC), el componente psicoactivo, estén por debajo del 1%. El Cannabidiol (CBD) es un componente no psicoactivo presente en la planta de Cannabis sativa y es especialmente destacado por sus numerosos beneficios terapéuticos. A diferencia del tetrahidrocannabinol (THC), otro compuesto presente en la planta que si produce efectos psicoactivos. Las condiciones geográficas y climáticas de Ecuador ayudan a un mayor rendimiento del cultivo y producción de cannabis no psicoactivo. Esta planta se considera como una hierba anual que puede alcanzar hasta 4 metros de altura presenta un tallo rígido y hojas pulidas y estipuladas con las inferiores dispuestas en forma opuesta y las superiores de manera alternada. Cultivar cannabis no psicoactivo en Ecuador resulta altamente rentable debido a que este genera oportunidades de empleo, impulsando la reactivación económica gracias a su a sus aplicaciones terapéuticas e industriales. En esta investigación estudió la situación del cannabis no psicoactivo en tres zonas del país (Cantón Cascales ubicado en la provincia de Sucumbíos, Quijos situado en la provincia del Napo y Tabacundo ubicado en la provincia de Pichincha) y los beneficios terapéuticos del cannabis no psicoactivo.